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Te extraño, Juani

Llevo mucho tiempo pensando que tal vez todo siempre fue mejor así. Que ya eramos diferentes, que ya no podíamos ser las amigas que fuimos. Que habíamos cambiado tanto que ya no nos hacíamos sentir bien.


Hoy te extraño como hace rato no te extrañaba. No porque durante este tiempo no te hubiese echado de menos, porque lo hice; pero siempre con un poco de resentimiento.


Hoy te extraño tal vez porque habría sido en un momento como este en el que me siento tan ahogada de cosas, sentimientos y sensaciones, que solo quiero llorar y sentirme bien llorando. Contigo siempre me sentí bien al llorar, tal vez porque tu lloras más en general, y como llorar es tan malo pues mejor llorar menos que más, mejor llorar menos que tú, o sea, mejor ser mejor que tú. 


Te extraño porque me conociste profundamente, hasta lo más feo, lo más crudo, hasta esto que tal vez nos rompió. Siempre me importé más a mi misma, para bien o para mal, a veces con dolor, a veces sin razón, a veces sin corazón. 


Por mucho tiempo me alejé porque sentía que todo lo juzgabas con dureza, y algunas otras cosas me parecían ridículas y ya. Realmente al nivel de cercanía que teníamos me frustraba que no fueras como yo quería y ya. Todo este tiempo me juré intacta de culpas, no es cierto. Soy la culpable de que nuestra amistad haya acabado como lo hizo. Algo de mi me decía que algo iba a cambiar, o que igual se iba a acabar, y tal vez tenía mucho miedo de eso, o tal vez lo quería así, o tal vez en el fondo sí lo quise tal cual y como sucedió. Para no tener que dar la cara, para no tener que enfrentar las consecuencias. 

Y las consecuencias... estas.

Que hasta hoy te pienso sin sentir que una parte de mi te odia porque me ahogaba en tristeza por el mundo, por ti, por mi. Que hasta hoy pued sentir con completo añoro el abrazo profundo que nos dábamos al llorar juntas, y cuánto me hacen falta tus palabras, y cuánto me permitiste sentir a tu lado sin decir nada, también. Y cuanto te amo y te amé, también. 

Te quiero mucho, siempre lo haré. 

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