Ir al contenido principal

Reality hype

Music was sometimes the foresentence of the forbidden underworlds I was always taught to fear.
I could see myself drawn in the darkness of endless beats that colored people's faces with stripes or dots right at the time to burst.
Ecstasy, the ecstasy.
I wanted to be alone because it felt good. I wanted to dance non-stop pretending not to think about anyone. I got lost.
I came back walking home. I shouldn't have donde that. It was 6 am and the streets were lonely, the sun was starting to paint the mountains yellow-burnt. I ran out of excuses to why my hands were so eagerly shaky, and then the roller coaster went south. I cried for no reason and spent all the tears left to spend in one big flawless end. I've never been my best self, I settle in for too little, because 'going big or going home' sounds like an actual loser's thoughts.

I don't want to be driven by something outside, other than my body. All I need lies inside of me. I just need to think about it and the butterflies of meeting you for the first time will show up. I don't want any other than this life. What more surreal to be living something you can't recall ever to have chosen. What more hype than not knowing what the forwarding second of existence brings, since it will never come first, always second. We live indeterminately in the past, but we like to think we're the future.

Never better drug for a moment than never knowing who you are, far beyond what and how you feel.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Me fui para volver

Me fui... pensando que nunca volvería, pero al mismo tiempo pensando en que precisamente por pensar así, volvería, y así fue. Tenía 21 años cuando decidí irme a vivir a Múnich, Alemania como Au Pair. Llevaba años queriendo hacerlo pero mis planes allá no eran muy claros, inicialmente quise viajar por el mundo aprendiendo idiomas y cuidando niños, lo cual en  su momento de verdad me gustaba mucho, pero en mi imaginario de lo que tenía que hacer para lograr alcanzar eso, pensaba que necesitaba antes que nada: mucho dinero. Me concentré en trabajar y ahorrar para poder pagar una agencia que me guiara en el proceso y me contactara con quienes serían me familia de acogida. Hacer eso me tomó más tiempo del que esperaba y cuando por fin logré pagar una agencia, me estafaron; pagué al rededor de 1200 dólares para hacer todo el proceso, el cual incluía cursos de alemán básico para pasar el examen que se necesita para la visa, todo para que después de 6 meses dijeran que mi contrato se hab...

Venceremos

Me siento inmune, lo soy. Al virus, al sufrimiento, al paro.  No paro de pensar en él. Es tal vez de las pocas cosas para las que no estoy dormida, inocua, débil.  Me sobran las ganas de estar con él, de saber de él, de verlo bien. Feliz, chistoso, seguro, él. Él, que a 5 horas de conocernos me dijo que no sabía porqué, pero de repente quería verme mucho, y tal vez que ya nunca me fuera de su lado. Él que aún cuando intento escribir con ira sobre todas las otras cosas que suceden además de él, siempre es la primera o la última frase, cualquiera de las dos de vital importancia. Me siento dormida, llevada, traída.  Hoy estaba en la marcha feminista. Una niña de 17 años se suicidó luego de haber sido violada por 4 policías en una estación. Ni siquiera eso me duele. No me duele porque sé que seguramente eso fue lo mejor que pudo hacer. Porque sé que estar allí es vivir una película de terror eterna. Nunca se borra. A veces la pasas más rápido, a veces más lento. A veces duele...

Un extraño que extraño.

Ahora que no tengo un nombre para ti.  Ahora que mi nombre es un diminutivo en tu historia.  Extraño, Extraño que conocí.   Extraño fue conocerte primero como de mentiras,  con fotos,  con mensajes,  con cosas en común.  Fantaseo, ahora que no estás,  Con las cosas que me gustan de ti.  Fantaseo con la imposibilidad de tenerte, y entonces tenerte allí, En un mundo de mentiras,  De tardes y atardeceres,  De visitas,  De conocerte hasta que dejes de ser extraño, y entonces te quiera, y tú a mí.  Conectar, querer, para mi,  Muchas veces es, fantasear.  Es dibujar en recuerdos futuros un mundo paralelo en el que todo lo que no fue, es.  Todo lo que no somos, somos.  Fuimos, y no me di cuenta que lo fuimos Y ahora que no estás, quisiera llenar mi cabeza con todos los espacios vacíos que tengo de tu ausencia..