Ir al contenido principal

Mayo 31 de 2012 - Ph10

No tiene nombre que me preguntes por qué razón te amo,
porque ni siquiera yo lo entiendo
No tiene nombre que lo preguntes una segunda vez,
porque por más que no lo entiendo... me conozco, sé que lo siento
No tiene nombre que me quieras confirmar si te amo,
solo quiero que confíes en que así como no sabemos cuando vamos a morir, sabemos que moriremos... asi quiero que confies en el amor que te tengo... que aunque a veces se te olvide, sepas que ahí está... por obligación ahí está.
Quiero que sepas que más allá de un simple corazón que te ama y se acelera cuando escucha tu voz... tambíen te amo con mis pies mientras camino y te pienso, con mi voz mientras te hablo y me miras, con mis manos mientras te rozo con la piel y sonrío, con mis ojos mientras te veo fijamente tratando de intimidarte, yo te amo con el cuerpo entero, te amaría mi cuerpo aún si mi alma lo dejase, te amaría mi alma aún si apenas flotara en la inmensidad. Te amaría, te amaría aun cuando te quisiera odiar porque nada que sea tan real como el amor que te tengo provocaría que te odiase. Te amaría si no existiese... te amaría en la inmensidad, te amaría con la intensidad del sol aunque no lo vea todo el tiempo, te amaría como el mar cuando se enfurece... te amaría y te amaré hasta que mi energía se agote y entonces tu y yo seamos solo uno. te amaría y te amaré hasta el final del pequeño mundo

Comentarios

Entradas populares de este blog

Venceremos

Me siento inmune, lo soy. Al virus, al sufrimiento, al paro.  No paro de pensar en él. Es tal vez de las pocas cosas para las que no estoy dormida, inocua, débil.  Me sobran las ganas de estar con él, de saber de él, de verlo bien. Feliz, chistoso, seguro, él. Él, que a 5 horas de conocernos me dijo que no sabía porqué, pero de repente quería verme mucho, y tal vez que ya nunca me fuera de su lado. Él que aún cuando intento escribir con ira sobre todas las otras cosas que suceden además de él, siempre es la primera o la última frase, cualquiera de las dos de vital importancia. Me siento dormida, llevada, traída.  Hoy estaba en la marcha feminista. Una niña de 17 años se suicidó luego de haber sido violada por 4 policías en una estación. Ni siquiera eso me duele. No me duele porque sé que seguramente eso fue lo mejor que pudo hacer. Porque sé que estar allí es vivir una película de terror eterna. Nunca se borra. A veces la pasas más rápido, a veces más lento. A veces duele...

Cami, ternura.

La gente me conoce y en algún momento empieza a decir que soy muy tierna. Siempre me sorprendo porque yo no me siento así. No me levanto todos los días y pienso en lo tierna que soy, lo suave, lo dulce. No me veo al espejo y pienso, qué tierna. No.  Cuando yo me miro a un espejo veo belleza, veo fuerza, intensidad, a veces cansancio, a veces tristeza, a veces fealdad. Veo muchas cosas, pero nunca ternura. Estos días que vengo recordando cosas de mi infancia pienso en quién era de pequeña, qué sentía, qué pensaba, cómo veía el mundo. Lo que recuerdo me produce mucha ternura, de mí, de esa niña que pensaba con pureza que todas las personas eran buenas, que todo lo que había para ella era amor. Quién eras Cami? Qué hicieron de ti, contigo? La recuerdo y quisiera sentirme como ella. Aparentemente ya lo soy, en apariencias solo, en lo que las personas ven de mi.  Esto empezaba con ira, pero la ira es una emoción secundaria a la tristeza. Así que ahora que la veo más a fondo, veo tr...

Me fui para volver

Me fui... pensando que nunca volvería, pero al mismo tiempo pensando en que precisamente por pensar así, volvería, y así fue. Tenía 21 años cuando decidí irme a vivir a Múnich, Alemania como Au Pair. Llevaba años queriendo hacerlo pero mis planes allá no eran muy claros, inicialmente quise viajar por el mundo aprendiendo idiomas y cuidando niños, lo cual en  su momento de verdad me gustaba mucho, pero en mi imaginario de lo que tenía que hacer para lograr alcanzar eso, pensaba que necesitaba antes que nada: mucho dinero. Me concentré en trabajar y ahorrar para poder pagar una agencia que me guiara en el proceso y me contactara con quienes serían me familia de acogida. Hacer eso me tomó más tiempo del que esperaba y cuando por fin logré pagar una agencia, me estafaron; pagué al rededor de 1200 dólares para hacer todo el proceso, el cual incluía cursos de alemán básico para pasar el examen que se necesita para la visa, todo para que después de 6 meses dijeran que mi contrato se hab...