No sé qué me pasa y no se pasa. Tal vez en mi vida pasada morí un Domingo, o el amor que me rompió el corazón así se llamaba, o qué sé yo, porque estas ganas de morirse los Domingos son un asco; a veces en la mañana, a veces en la tarde, a veces en la noche. Pensé erróneamente que hoy no me atajaría porque todo el día me sentí en otro día, y no sé si fue que me di cuenta que era Domingo, o si llegó la sensación y entonces tuvo sentido que así fuera, pero es que quiero que las ganas de llorar se me quiten porfa, que no es justo que me acabe la vida sólo por un día a la semana, u ojalá solo existiera un Domingo al año porque es que querer morirse una vez a la semana ya no es humano, tal vez es eso, tal vez es animal, tal vez soy como "La mujer salvaje que corre con los lobos", tal vez el Domingo es mi luna llena y tal vez así mismo me marea la marea, y tal vez ya no debería escribirlo más, porque si lo escribo es un pensamiento canonizado, y si hay pruebas es real, y si es re...